domingo, 5 de agosto de 2012

Divorcio con hijos

El divorcio se entiende como la disolución legal del vínculo del matrimonio. Para acceder a él existen varios caminos, los cuales dependerán de los motivos que gatillen la ruptura irremediable del matrimonio. Por ejemplo, si ambos cónyuges están de acuerdo en terminar con la unión matrimonial pueden optar por el tipo de divorcio denominado divorcio de común acuerdo, cuando no hay acuerdo por parte de los cónyuges la opción indicada es el divorcio unilateral, y  si existen motivos graves que atenten contra los deberes y obligaciones del contrato matrimonial, como la violencia intrafamiliar, las infidelidades y otras conductas insanas, por mencionar solo algunos,  el camino a seguir es el divorcio culposo.

Además de estos tipos de divorcio, existen otros casos particulares que determinan las condiciones, pasos a seguir, dificultades, causas y consecuencias de un divorcio, como es el caso de los matrimonios con hijos. En estas determinadas situaciones existe un tratamiento diferente en el proceso de disolución legal del vínculo matrimonial y en el resultado de este tipo de demandas.

Entre los factores que hacen más complejo un divorcio con hijos podemos encontrar:

La custodia legal en el divorcio con hijos


Dependiendo del tipo de divorcio puede atribuirse a uno de los cónyuges, o bien, a ambos de manera compartida, pudiendo incluso ser atribuida a un tercero, cuando la situación lo amerita de manera excepcional. Esta determinación implica quién se quedará a cargo de los hijos y le otorga derechos sobre ellos y obligaciones para con ellos, como el deber de vivir con ellos, cuidarlos y asistirlos.

El régimen de visitas


Es una manera de regular y asegurar las visitas del padre que no posee la custodia legal de los hijos. Otorga al cónyuge el derecho de visitarlos y comunicarse con ellos. Si no existe acuerdo entre ambos padres, es deber de la ley determinar las condiciones y características del régimen de visitas, teniendo como objetivo principal resguardar el bienestar de los hijos siempre y cuando estos sean menores de edad, derecho que puede suprimirse si ocurre algún tipo de incumplimiento del acuerdo u otras faltas graves.

Además de estos factores, en un divorcio con hijos hay muchos otros factores a considerar, por ejemplo las consecuencias que traerá para los niños ser testigos de y víctimas de la ruptura matrimonial de sus padres. En la mayoría de los casos esta experiencia resulta dolorosa y traumática, por lo que hay que poner especial cuidado en el tratamiento del proceso de divorcio y sus etapas posteriores para hacerlo lo menos dramático posible para los niños y así resguardar su salud mental y emocional.

El mejor consejo que te podemos dar para tratar con este tema es ser muy abierto y comunicativo con tu(s) hijo(s). Es importante hablar con tu ex pareja y hacerle entender que por más malos términos en los que ustedes se encuentren, sus hijos no deben pagar por esto. A menudo cuando las relaciones terminan los más afectados son los hijos, por eso aunque les cueste tienen que trabajar juntos para hacer de este proceso menos doloroso y más entendible para ellos.

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